La
CALLE DEL
POZO SECO debe su nombre a la presencia secular, adoptado por el hablar popular, de un pozo seco en la misma. Es una de las
calles más antiguas del tejido urbano burgalés.
En ella residió el alcalde mayor Antonio Sarmiento, padre de Francisco Sarmiento que a su vez fue héroe de Castelnuovo y abuelo de Luís Sarmiento, embajador en
Portugal.
En la
Plaza del Pozo Seco se celebraban torneos y
fiestas con asistencia de la gente más notable de la ciudad. En el subsuelo de la misma están las
bodegas del siglo XVI, excavadas para dar servicio al
palacio de Castilfalé, permaneciendo muy bien conservadas.
Fue uno de los lugares más frecuentados en la
antiguedad. En 2011 la plaza fue objeto de remodelación para darle un uso más peatonal, desapareciendo 20
plazas de
aparcamiento y generando cierto malestar entre los vecinos.
La calle tiene entrada por la calle Fernán González y salida por calle Saldaña.