Os aseguro que la mayoría de las personas independientes del
pueblo, y me refiero a independientes religiosamente, pensamos que este cura "vaya con Dios" y a ser posible se queda allí para siempre y no vuelva por aquí. Aquí necesitamos un cura
amigo, social, equilibrado, con ganas de ayudar, y no un tipejo adinerado, acomodado, de mentalidad fascistoide y que solo piensa en su estómago y en sus
amigos (que son los que llenan su estómago). Vaya con Dios, y que no vuelva.