Me escaqueo unos minutillos del trabajo para enviar un cordial saludo a todos mis paisanos de
Zaorejas. Yo soy medio zaorejano de hecho y zaorejano total de corazón. Me muero de ganas por volver a darme unas cuantas caminatas y
paseos en bici por nuestros bellos parajes, bañarme en el
río y volver a ver a los viejos
amigos. Lástima que Zaorejas haya perdido tanta vida así que un especial abrazo a los que aún viven allí y a los que se preocupan por mantener Zaorejas vivo. Fernando Pichilín.