Por Barcelona el día ha amanecido soplando bastante aire aunque poco a poco se ha ido calmando. En Olesa de Montserrat que es donde hemos estado comiendo una calçotada acompañada de chuletas de cordero y otros alimentos en casa de unos amigos, la comida la hicimos bien, incluso con solecito, pero al comenzar a tomar el café tuvimos que ponernos a cubierto porque la lluvia, a pesar de no ser muy abundante, calaba hasta los huesos, y como no podía ser de otra manera, ha "salido a relucir" el tema de los fenómenos atmosféricos acaecidos estos días en varios lugares de España. Por lo demás, como la comida ha sido entre amigos, el día lo hemos pasado estupendamente.
Besetes para los amigos.
Besetes para los amigos.
