¿Desde las almenas...? ¿Pero, de qué castillo, cuenka?
En Alconchel tenemos Castillo, pero nada parecido a este de la foto. Besetes, guapa.
Buenas tardes Cuenkaaaaaaaaaaaaaaa. Así que ya hace calorcito por la Capital, ¿no es así? (por la capital conquense, quiero decir jejejejeje)
Por Barcelona también hace un tiempo muy bueno; da gusto salir a pasear y ver los parterres reverdecer.
Un beso guapa.
AKHENATON
¡Qué bella es tu aurora en el horizonte del cielo, Oh Aton vivo, iniciador de la vida!...
¡Cuando te elevas en el borde del cielo, Oh radiante Aton, Oh radiante Aton, el mundo se ilumina!... Los hombres se despiertan y se levantan. Al ver tu aurora sus brazos se elevan para adorar tu llegada…
Aunque estás lejos, tus rayos caen en la Tierra y las caras de los hombres son su reflejo.
LOS INDIVIDUOS que consiguen realizarse a sí mismos saben lo que quieren. Conocen y no necesitan comprobar sus propios impulsos, deseos u opiniones acerca de la calidad de un producto, ni consultar las críticas de los periódicos para decidir si les agrada o no cualquier comedia, película o libro. Pueden seguir el consejo de San Agustín sin temor de ofender a los demás: "Ama a Dios y obra como quieras"...
En Alconchel tenemos Castillo, pero nada parecido a este de la foto. Besetes, guapa.
Buenas tardes Cuenkaaaaaaaaaaaaaaa. Así que ya hace calorcito por la Capital, ¿no es así? (por la capital conquense, quiero decir jejejejeje)
Por Barcelona también hace un tiempo muy bueno; da gusto salir a pasear y ver los parterres reverdecer.
Un beso guapa.
AKHENATON
¡Qué bella es tu aurora en el horizonte del cielo, Oh Aton vivo, iniciador de la vida!...
¡Cuando te elevas en el borde del cielo, Oh radiante Aton, Oh radiante Aton, el mundo se ilumina!... Los hombres se despiertan y se levantan. Al ver tu aurora sus brazos se elevan para adorar tu llegada…
Aunque estás lejos, tus rayos caen en la Tierra y las caras de los hombres son su reflejo.
LOS INDIVIDUOS que consiguen realizarse a sí mismos saben lo que quieren. Conocen y no necesitan comprobar sus propios impulsos, deseos u opiniones acerca de la calidad de un producto, ni consultar las críticas de los periódicos para decidir si les agrada o no cualquier comedia, película o libro. Pueden seguir el consejo de San Agustín sin temor de ofender a los demás: "Ama a Dios y obra como quieras"...
