En la Alta Edad Media, hacia el siglo X, la zona ya debía de estar bastante poblada, a juzgar por la abundancia de núcleos de población,
ermitas rupestres como «los Ventanos» en Villamoñico, enterramientos excavados en
roca arenisca de forma antropomórfica y restos cerámicos datados en la época. A partir de los siglos XI y XII comienzan a construirse las abundantes
iglesias románicas de la comarca, que enlazan con la
tradición constructiva del
románico rural de las comarcas del norte de
Palencia y
Burgos