Que gusto encontrar una foto del monumento a los artistas cántabros que refleje el momento en que se concibió el parque original. El monumento, en cuyas bases venía indicada su altura para "poder ser visto desde la carretera" ha sido eliminado prácticamente; la última vez que estuve allí, además de ser el nido de las antenas de la policía municipal había sido pintado de azul en su parte superior, supongo que por una mente "lucida" que pensaba que así se confundiría con el cielo. De los cuatro accesos a la parte superior tres han sido convertidos en maceteros ¡lo juro!, es lo que le faltaba al monumento que ya nació como cementerio, por eliminarse desde el comienzo cualquier técnica de grabado sobre el hormigón, por la imagen funeraria que produce la colocación de placas. Sirva el lamentable estado de este singular monumento, interpretación del mágico espacio interior de la Vera Cruz de Segovia, como reflejo perfecto de lo que hoy en día un político es capaz destruir.