Los perros de la plaza de Santa Ana, LAS PALMAS DE GRAN CANARIA

Los perros de la plaza de Santa Ana.

Se trata de ocho esculturas que representan a canes que se encuentran en un extremo de la plaza, orientados hacia la fachada de la catedral.
Están realizados en hierro fundido, si bien pintados de verde para hacerlos pasar por bronce. Fueron colocados en la plaza en 1895, no conociéndose con exactitud quién los realizó (aunque se apunta que posiblemente fueron obra de Henry Alfred M. Jaquermart)
Lo que si está claro es que se han convertido en uno de los símbolos más fotografiados de la ciudad, pues la verdad es que sorprenden y atraen al visitante, por lo curioso y original

Las Palmas de Gran Canaria se ubica al nordeste de Gran Canaria, de la que es su capital. Una ciudad moderna, cosmopolita, con un clima suave y delicioso.
Por su población, con 378.675 habitantes (año 2021), es la novena ciudad española y la más poblada de Canarias.
En la actualidad comparte la capitalidad de la Comunidad Autónoma de Canarias con Santa Cruz de Tenerife.
El 24 de junio de 1478, un ejército al mando del capitán Juan Rejón enviado por la Corona de Castilla, instala un campamento militar junto a la desembocadura del barranco del Guiniguada. Ese fue el germen de la que, poco más tarde, se convirtió en la primera ciudad fundada por la Corona de Castilla en el Atlántico. Este hecho sucedía unos años antes del viaje de Cristóbal Colón al continente americano. Las Palmas de Gran Canaria sirvió como ejemplo para levantar centenares de ciudades en América, desde la Patagonia a Estados Unidos.
El siglo XX, a partir de la segunda mitad, convirtió a la ciudad en la cuna de la industria turística de las Islas Canarias. Hoteles y apartamentos reforzaron la infraestructura urbana heredada del siglo anterior con balnearios y apartamentos de ocupación estacional. El turismo extranjero empezó a llegar y la sociedad dio un vuelco. La actividad del Puerto de la Luz, convertido en una base portuaria prioritaria a nivel internacional, provocó nuevas transformaciones hasta convertir a la ciudad en el centro económico y comercial del archipiélago. Una ciudad que no ha parado de crecer en población, modernización y en influencia social.