Desde la atalaya de una edad escandalosa, por lo angosta, que no por longeva, me reencuentro con un Pilar de ultraje. Sali de la pola el dia nueve de este mes con la sensacion de que me habian quitado algo. El colegio del Pilar no se merecia un final asi. Los gestores madrileños, igual que en la vida social (el dia a dia) han decidido que no merece la pena seguir aguantando la calidad de enseñanza , optan por dejar en manos de no se quien, la gestion y se destroza toda una bonita historia cimentada desde hace muchos años en la coherencia, el saber, la decencia, la ilusion y la memoria de tantos como fuimos. De tantos como añoramos esas epocas. Saludos a todos y que pidan perdon aquellos que nos dejan sin parte de nuestra historia.
