Un chubasco pasajero de la
Primavera lluviosa, transforma la
Plaza de Fray Ceferino convertida en un gran
espejo natural. Asistimos al espectáculo de la realidad virtual, en la cula las
casas del entorno se duplican en negativo colorista y desdibujado... En la
esquina, los jubilados que forman parte de la sempiterna tertulia lavianesa... siguen viendo pasar la vida - como si nada-