El
torreón de La Zuda de
Zaragoza es lo que queda del
palacio de la Zuda, Azuda o Sudda, alcázar musulmán situada dentro de la ciudad, en el que se encontraba el gobierno. Su forma actual es de la segunda mitad del siglo XVI. Se encuentra en el extremo occidental de la
plaza del Pilar, detrás de la
Fuente de la Hispanidad y al lado de la
iglesia de
San Juan de los Panetes. Tras la excavación arqueológica y la restauración acabadas en el 2001, cobija una oficina municipal de turismo.
Construida por los musulmanes como
torre del
homenaje del palacio del gobernador de la ciudad, durante la época de la taifa de Zaragoza fue parte del palacio de
invierno, siendo el de
verano la Aljafería. Tras la Reconquista de la ciudad, se convierte en palacio real, papel que mantiene hasta el siglo XIII cuando la sede pasa a la Aljafería. En 1180 pasa a pertenecer a la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén que la convierten en un
hospital y construyen una iglesia, cuya torre es la de la iglesia de San Juan de los Panetes. Desde el siglo XIV el
edificio se convierte en sede del Castellán de Amposta, la máxima autoridad de la orden en
Aragón. En 1725 se construyó la iglesia de San Juan de los Panetes. El palacio de la Zuda es abandonado en 1835 tras la desamortización de Mendizábal. De 1857 a 1910, con el permiso del Castellán de Amposta, el edificio fue ocupado por las Religiosas Adoratrices, fundadas en 1856 por la Madre Sacramento, María Micaela Desmaisières López de Dicastillo, vizcondesa de Jorbalán.
Escudo de
España (mazonado). svg Bien de interés cultural
De 1931 a 1937 se derribó el edificio, salvándose sólo la torre, las
murallas romanas y la iglesia de San Juan de los Panetes.