MIL NOVECIENTOS CINCUENTA Y TRES.
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Dice nuestro inagotable refranero castellano “que de bien nacidos es ser agradecidos”. Por eso y aunque tarde (algunos ya sabéis a que me suelo dedicar cada primeros de mes y no los viernes primeros ¿os acordáis?), y perdonando el “retintín”, sin ánimo ofensivo de algunos, os doy las gracias de todo corazón por acordaros ese día de mi humilde persona. (A mi amigo el de los Palomos le pongo falta).
Efectivamente, hace 59 años, mi “añorada” Madre DIO A LUZ un pequeño vástago rubiales y con los ojos azules de la dinastía MAROTO-LETE. Para ilustración de algunos (nunca viene mal aprender algo nuevo), si esos 59 años desde mi alumbramiento, fueran años luz (aunque un año luz no es una medida de tiempo sino de longitud) hubiera recorrido 9,46 billones de km cada año transcurrido, o sea 558,14 billones de km, que no está nada mal.
En éste año pasaron muchas cosas fuera y dentro (algunas muy importantes) de nuestra querida España, todavía tenebrosa y represiva por causa de la Dictadura Franquista.
En el plano internacional, en la URSS falleció el “sanguinario” Stalin y le sustituyó Nikita Jrushchov. El Mariscal Tito fue elegido Presidente de la República de Yugoeslavia. En Inglaterra, en la abadía de Westminster, se proclamó reina a Isabel II (todavía viva ante la desesperación de su hijo Carlitos y su querida Camila). En Egipto abdicó (o lo destronaron) el rey Faruk y se dio pasa a la República al frente de la cual se pondría Nasser. También, apareció por primera vez en escena un jovencito desconocido llamado Fidel Castro, que junto a un "grupito de revolucionarios" intentaron asaltar el cuartel Moncada del golpista Fulgencio Bautista.
En la Piel de Toro, en el terreno periodístico, se destacó el inicio de la distribución oficial de Coca-Cola, que SEAT sacó al mercado su primer coche y que se emitió la moneda de 50 reales.
En el terreno deportivo, tan pequeñito me llevé mi primer disgusto, y es que el Barça fue Campeón de Liga. Pero lo compensé el enterarme de que Alfredo Di Stéfano jugó su primer partido con el Real Madrid y se fichó a Gento
En el plano político, se produjeron tres grandes acontecimientos muy bien acogidos por el Gobierno Franquista, ya que suponen el inicio de la aceptación del Régimen por los Organismos Internacionales y el control de la Iglesia en España.
En primer lugar, España ingresa en la UNESCO, agencia especializada de la ONU, y ésta (la ONU), revoca las sanciones diplomáticas impuestas a España y comienzan a regresar los Embajadores de casi todos los países.
Seguidamente, se firma un Convenio Militar con EE. UU, en el que se acuerda el envío de ayuda Norteamericana a cambio de la cesión de los terrenos necesarios para la construcción de dos bases navales (Rota y Cartagena) y cuatro bases aéreas (Zaragoza, Torrejón de Ardoz, Morón y El Copero en Sevilla).
Por último, s aprueba el "Concordato de 1953 con la Santa Sede" con sus concesiones a la Iglesia Católica, tan leoninas y de tal tamaño y profundidad política que la Jerarquía Eclesiástica lo consideró como el mejor acuerdo que se había firmado en toda la Historia. Este Concordato se ha aplicado tal cual durante veintiséis años y, tras ser modificado en 1976 y 1979, continúa vigente casi 60 años después, de ellos más de treinta en el marco de la Constitución de 1978. Algunos católicos “progresistas” afirman que el Concordato de 1953 ya no existe, que está derogado. Al contrario, no ha sido nunca derogado y en los documentos legales se cita siempre como “vigente”. Ni siquiera se ha planteado su denuncia a pesar de sus defectos de constitucionalidad.
Bueno, me despido recordando el viejo tango aquel de Carlos Gardel de “Sentir…., que es un soplo la vida, QUE VIENTE AÑOS NO ES NADA....”. Sin embargo, no dejo de preguntarme ¿y 60? (si los vemos), ¿serán pocos?, ¿serán muchos?. QUI LO SÁ,
Saludos y hasta otra,
P. D. Otro día contaré como he podido mandar éste correo con la censura (justificada por medidas de contra-filtraciones) que tengo todavía.
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Dice nuestro inagotable refranero castellano “que de bien nacidos es ser agradecidos”. Por eso y aunque tarde (algunos ya sabéis a que me suelo dedicar cada primeros de mes y no los viernes primeros ¿os acordáis?), y perdonando el “retintín”, sin ánimo ofensivo de algunos, os doy las gracias de todo corazón por acordaros ese día de mi humilde persona. (A mi amigo el de los Palomos le pongo falta).
Efectivamente, hace 59 años, mi “añorada” Madre DIO A LUZ un pequeño vástago rubiales y con los ojos azules de la dinastía MAROTO-LETE. Para ilustración de algunos (nunca viene mal aprender algo nuevo), si esos 59 años desde mi alumbramiento, fueran años luz (aunque un año luz no es una medida de tiempo sino de longitud) hubiera recorrido 9,46 billones de km cada año transcurrido, o sea 558,14 billones de km, que no está nada mal.
En éste año pasaron muchas cosas fuera y dentro (algunas muy importantes) de nuestra querida España, todavía tenebrosa y represiva por causa de la Dictadura Franquista.
En el plano internacional, en la URSS falleció el “sanguinario” Stalin y le sustituyó Nikita Jrushchov. El Mariscal Tito fue elegido Presidente de la República de Yugoeslavia. En Inglaterra, en la abadía de Westminster, se proclamó reina a Isabel II (todavía viva ante la desesperación de su hijo Carlitos y su querida Camila). En Egipto abdicó (o lo destronaron) el rey Faruk y se dio pasa a la República al frente de la cual se pondría Nasser. También, apareció por primera vez en escena un jovencito desconocido llamado Fidel Castro, que junto a un "grupito de revolucionarios" intentaron asaltar el cuartel Moncada del golpista Fulgencio Bautista.
En la Piel de Toro, en el terreno periodístico, se destacó el inicio de la distribución oficial de Coca-Cola, que SEAT sacó al mercado su primer coche y que se emitió la moneda de 50 reales.
En el terreno deportivo, tan pequeñito me llevé mi primer disgusto, y es que el Barça fue Campeón de Liga. Pero lo compensé el enterarme de que Alfredo Di Stéfano jugó su primer partido con el Real Madrid y se fichó a Gento
En el plano político, se produjeron tres grandes acontecimientos muy bien acogidos por el Gobierno Franquista, ya que suponen el inicio de la aceptación del Régimen por los Organismos Internacionales y el control de la Iglesia en España.
En primer lugar, España ingresa en la UNESCO, agencia especializada de la ONU, y ésta (la ONU), revoca las sanciones diplomáticas impuestas a España y comienzan a regresar los Embajadores de casi todos los países.
Seguidamente, se firma un Convenio Militar con EE. UU, en el que se acuerda el envío de ayuda Norteamericana a cambio de la cesión de los terrenos necesarios para la construcción de dos bases navales (Rota y Cartagena) y cuatro bases aéreas (Zaragoza, Torrejón de Ardoz, Morón y El Copero en Sevilla).
Por último, s aprueba el "Concordato de 1953 con la Santa Sede" con sus concesiones a la Iglesia Católica, tan leoninas y de tal tamaño y profundidad política que la Jerarquía Eclesiástica lo consideró como el mejor acuerdo que se había firmado en toda la Historia. Este Concordato se ha aplicado tal cual durante veintiséis años y, tras ser modificado en 1976 y 1979, continúa vigente casi 60 años después, de ellos más de treinta en el marco de la Constitución de 1978. Algunos católicos “progresistas” afirman que el Concordato de 1953 ya no existe, que está derogado. Al contrario, no ha sido nunca derogado y en los documentos legales se cita siempre como “vigente”. Ni siquiera se ha planteado su denuncia a pesar de sus defectos de constitucionalidad.
Bueno, me despido recordando el viejo tango aquel de Carlos Gardel de “Sentir…., que es un soplo la vida, QUE VIENTE AÑOS NO ES NADA....”. Sin embargo, no dejo de preguntarme ¿y 60? (si los vemos), ¿serán pocos?, ¿serán muchos?. QUI LO SÁ,
Saludos y hasta otra,
P. D. Otro día contaré como he podido mandar éste correo con la censura (justificada por medidas de contra-filtraciones) que tengo todavía.
Tu amigo el de los Palomos solo felicita si hay viandas por medio, me he vuelto muy materialista, las ideas solo producen sospechas y malas digestiones.
