Se encuentran dos hombres que van paseando cada uno a su perro. Uno lleva un pastor alemán y el otro un perro salchicha.
El pastor alemán empieza a ladrarle al otro perro, entonces el dueño, del perro salchicha le dice al otro: oiga coja usted a su perro que como se me escape el mío se lo va a comer.
-Pero qué dice usted! si mi perro es un pastor alemán! dice el otro.
- ¿qué se apuesta que como suelte mi perro salchicha se come al suyo?
-Lo que quiera! responde el otro.
-Bien ahí va. El dueño suelta al perro salchicha y éste de unos cuantos mordiscos se come al pastor alemán.
Su dueño incrédulo ante lo que ve, le dice al otro: pero cómo es posible con el dinero que me he gastado en adiestrar para la pelea a mi pastor alemán que le haya pasado esto.
-Más me he gastado yo en hacerle la cirugía estética a mi cocodrilo, contesta el otro.
El pastor alemán empieza a ladrarle al otro perro, entonces el dueño, del perro salchicha le dice al otro: oiga coja usted a su perro que como se me escape el mío se lo va a comer.
-Pero qué dice usted! si mi perro es un pastor alemán! dice el otro.
- ¿qué se apuesta que como suelte mi perro salchicha se come al suyo?
-Lo que quiera! responde el otro.
-Bien ahí va. El dueño suelta al perro salchicha y éste de unos cuantos mordiscos se come al pastor alemán.
Su dueño incrédulo ante lo que ve, le dice al otro: pero cómo es posible con el dinero que me he gastado en adiestrar para la pelea a mi pastor alemán que le haya pasado esto.
-Más me he gastado yo en hacerle la cirugía estética a mi cocodrilo, contesta el otro.
