Once años vivimos ahí, en principio la estación era más pequeña, se hizo un almacen, allí estuvimos viviendo unos meses, hasta que nos ampliaron la casa, dos dormitorios, más el cuarto de baño, hoy esa casa para mí la quisiera, la mía no es pequeña más hay miles de libros, tenemos toda ella ocupada con estanterias, desde la entrada al pasillo, en el amacen que gran biblioteca podemos hacer, si estuviera como antes sin dudar al menos los veranos alquilaria una casa pasaria un verano sin agobios, podria salir a la calle ya que aceras le habeis puesto, aquí aceras las hay, pero hay tanto martuerzo, a cualquiera le dan el cané de conducir con lo cual sobre todo de día es un peligro salir (sola)salir con mí hijo en el coche, nada es igual mucho escaparate, grandes almacenes, aunque compramos donde verdad nos conocen en en la planta del libro, somos clientes a los que cada tres eses libros nos regalan, me quieren lo/as dependientas, la supervisora intima, nos llama por teléfono cuando tienen una buena ganga, aquí leer, lo que es leer(POCO Y MAL)sumar se les da muy bien, más como el dinero no es de mi agrado, en grado superior como Baúl ni New York. Un saludo. Teresa.
