Con las torrijas, el potaje, la tortilla y lo que sigue, es de lo único que disfrutamos, cuando terminen las fiestas no entramos en los trajes.
Yo ya me he pasao cuatro tallas y eso que yo no como pasteles, pero de cuchareo, me pongo que ni veo.
jajajajajajaja. Todas estamos comiendo más que nunca, parece que así quitamos las penas y nos distraemos un poco en la cocina.