Torre de la Asunción de noche, BUJALANCE

Perdonen mi atrevimiento si me considero uno, entre las pesonas relacionadas con ese "maravilloso pueblo". No sou bujalanceño, pero mi "relación" es de hace mucho tiempo, cuando conocí una bujalanceña que, a través del tiempo transcurrido, continúa presente en mi pensamiento. Frecuentemente, repaso estas páginas, renovando el cariño y simpatía que aquella persona me dejó.
La torre más bonita del mundo sin ninguna duda. Es que cuando estas fuera de Bujalance un tiempo, la echas de menos y cuando vuelves y te vas acercando por la carretera y empieza a despuntar entre los cerros de olivos se te ponen los vellos de punta y el corazon se te acelera. Es un sentimiento que solo lo puede comprender un bujalanceño de corazón o una persona relacionada con este maravilloso pueblo.